Tener un abdomen plano, en la actualidad es una prioridad, tanto para hombres como para mujeres. Para lograr que tus abdominales sean visibles solo necesitas de tu cuerpo. El tipo de ejercicios necesarios para moldear tu cuerpo.
Si la realidad te enfrenta a una imagen que no deseas de ti mismo, y notas que necesitas recuperar firmeza y tonicidad, es hora de ponerse a trabajar. Tu cuerpo no puede eliminar los excesos adiposos concentrados en la zona abdominal, si no ejercitas a la vez el resto del cuerpo. De modo que sería conveniente que dejes de pensar en largas sesiones de abdominales y recurras a una rutina más integral.
Es necesario que tu cuerpo entero reporte un menor exceso de grasa para lograr, finalmente un abdomen plano. Para esto se aconseja realizar tres veces por semana caminatas rápidas, esto acelera tu ritmo cardiaco y por lo tanto tu metabolismo, es decir, doble beneficio.
Otra opción es realizar ejercicios abdominales, de treinta segundos de trabajo duro, (ejercicios repetidos, rápidos y correctamente), seguido de un minuto de ejercicio de relajación moderado, esto puede ser caminar activamente por ese lapso.
En treinta segundos de gran esfuerzo puedes realizar el siguiente ejercicio de trabajo abdominal. Recuéstate en el piso (intenta utilizar un aislante o colchoneta para que la fricción repetida en el coxis no dañe tu piel) traba tus brazos detrás del cuello, debajo de la cintura o cruzadas sobre el pecho. Traba también tus pies, teniendo las rodillas flexionadas. El movimiento consiste en elevar los hombros, con la espalda recta, hasta unir el pecho con las rodillas. Un ejercicio abdominal más exigente aun, supone llegar hasta el pecho y sostener “en el aire” el torso por cuatro segundos, volviendo lentamente a recostarte. Esto es importante, los brazos no deben hacer fuerza, no empujes el cuello ni la cintura, la fuerza debe realizarse con los músculos abdominales.
Si realizas las caminatas semanales y también la ejercitación abdominal acompañada de una dieta sana e integral, los resultados no se harán esperar, tus abdominales estarán marcados y visibles, sin excesos de grasas. Y el beneficio es doble, puesto que tu calidad de vida mejorara considerablemente.
Si la realidad te enfrenta a una imagen que no deseas de ti mismo, y notas que necesitas recuperar firmeza y tonicidad, es hora de ponerse a trabajar. Tu cuerpo no puede eliminar los excesos adiposos concentrados en la zona abdominal, si no ejercitas a la vez el resto del cuerpo. De modo que sería conveniente que dejes de pensar en largas sesiones de abdominales y recurras a una rutina más integral.
Es necesario que tu cuerpo entero reporte un menor exceso de grasa para lograr, finalmente un abdomen plano. Para esto se aconseja realizar tres veces por semana caminatas rápidas, esto acelera tu ritmo cardiaco y por lo tanto tu metabolismo, es decir, doble beneficio.
Otra opción es realizar ejercicios abdominales, de treinta segundos de trabajo duro, (ejercicios repetidos, rápidos y correctamente), seguido de un minuto de ejercicio de relajación moderado, esto puede ser caminar activamente por ese lapso.
En treinta segundos de gran esfuerzo puedes realizar el siguiente ejercicio de trabajo abdominal. Recuéstate en el piso (intenta utilizar un aislante o colchoneta para que la fricción repetida en el coxis no dañe tu piel) traba tus brazos detrás del cuello, debajo de la cintura o cruzadas sobre el pecho. Traba también tus pies, teniendo las rodillas flexionadas. El movimiento consiste en elevar los hombros, con la espalda recta, hasta unir el pecho con las rodillas. Un ejercicio abdominal más exigente aun, supone llegar hasta el pecho y sostener “en el aire” el torso por cuatro segundos, volviendo lentamente a recostarte. Esto es importante, los brazos no deben hacer fuerza, no empujes el cuello ni la cintura, la fuerza debe realizarse con los músculos abdominales.
Si realizas las caminatas semanales y también la ejercitación abdominal acompañada de una dieta sana e integral, los resultados no se harán esperar, tus abdominales estarán marcados y visibles, sin excesos de grasas. Y el beneficio es doble, puesto que tu calidad de vida mejorara considerablemente.
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