Como
Tener un Abdomen Plano
Primero
hay que tener claro que una buena digestión es el punto de partida de un
abdomen plano y ligero, sin malestares ni ardores y con una adecuada
metabolización de las grasas. Por eso, es necesario fijarse en los alimentos
que consumimos, cómo los preparamos y hasta el orden en que los digerimos.
1.-
Ejercicios:
Antes de fortalecer los músculos abdominales es fundamental
eliminar la grasa que se encuentra en esa zona mediante ejercicios aérobicos,
como caminar, trotar o andar en bicicleta como mínimo 30 minutos, cinco veces a
la semana. La constancia es clave en el éxito de los resultados.
2.-
Alimentación saludable:
Las dietas no depende de lo que se come, sino que
del tamaño de las porciones. Por tanto, sugiere una dieta equilibrada y baja en
grasas.
El propósito es prescindir de frituras, chocolates, alcohol, postres y dulces; y preferir los cereales integrales, frutas, verduras, legumbres y carnes blancas, como pollo y pescado.
El propósito es prescindir de frituras, chocolates, alcohol, postres y dulces; y preferir los cereales integrales, frutas, verduras, legumbres y carnes blancas, como pollo y pescado.
3.- Consumir proteínas y fibras todos los días:
Las proteínas contribuyen a la
formación de los músculos y las fibras solubles, como la avena, no sólo
disminuyen la grasa de la cintura, sino que además ayudan a regular el tránsito
intestinal, impidiendo el estreñimiento y, por ende, la hinchazón.
4.-
Ordenarse en las comidas:
Lo importante es cómo se come y la forma en que
se distribuyen los alimentos, lo que permitirá reducir la grasa abdominal y
controlar los ataques de ansiedad.
Es fundamental seguir los siguientes pasos: contar con un buen desayuno, que incluya frutas, cereales, lácteos y avena; consumir cinco comidas diarias, para contribuir a acelerar el metabolismo; cenar poco y de preferencia antes de las 21:00 horas; y no beber demasiado durante las comidas.
Es fundamental seguir los siguientes pasos: contar con un buen desayuno, que incluya frutas, cereales, lácteos y avena; consumir cinco comidas diarias, para contribuir a acelerar el metabolismo; cenar poco y de preferencia antes de las 21:00 horas; y no beber demasiado durante las comidas.
5.-
Mejorar la postura:
Intentar mantener una postura corporal recta en todo
momento, tanto de pie como sentada. De hecho, si contraes el vientre 2 o 3
veces por semana en series de 12 repeticiones, podrías tonificar tus músculos.